sábado, 25 octubre 2003
Esta noche he tenido un sueño muy real..., real por el argumento, por que reconozco lugares, personajes, y por que bien podría pasarme hoy mismo... Hacía tiempo que no recordaba un sueño al despertarme, supongo que lo recuerdo por que, a eso de las 4.30, me he despertado con mucha sed, recordando entonces lo que había cenado ayer... (untura de camembert al horno, mm..., os la recomiendo! pero no para la noche..., ya veis lo que pasa...).
Me he levantado medio borracha, he ido palpando las paredes de la casa hasta llegar a la nevera (en la otra punta...!! por que mi nevera no esta en la cocina...), y me he desplomado en el sofá... No me tenía en pie... Entonces me ha venido a la memoria todo el sueño, de inmediato... : iba en coche con uno de los amigos de Ian, y Misha venía conmigo; de repente, él que conducía, agarra una curva muy cerrada a la izquierda, dejando ver al otro lado un precipicio..., de vértigo!, por que las ruedas casi rozaban la parte más externa del arcén. Miro abajo y veo rocas, enormes, y agua... Parecía el acantilado de un río, de alta montaña..., pero estábamos al lado de mi casa!! Lo sé por que no hacía ni 30 segundos que nos habíamos montado en el coche y me había venido a buscar a casa... Entonces, al muchacho, no se le ocurre otra cosa que coger a Misha... y tirarla por la ventana!!! Así..., como quien no quiere la cosa...!!! Hijo de puta...!!!
Yo, quedo muerta, contemplando el espectáculo y la sonrisa de su cara..., viendo como la pobre gata cae por el precipicio y termina por reventar en las rocas... Ni un maullido, ni un grito por mi parte, ni un intento por cogerla, ni un puñetazo al subnormal de mi amigo... (desde hoy, ya no sé si me apetece que lo sea, la verdad...). Nada..., absolutamente nada... Lo único que yo esperaba, asomándome a las rocas, era que mi gata se recuperara, que me diera alguna señal de vida, que me demostrara que ella ha salido de situaciones peores..., como cuando se cayó de mi antigua casa (un 4º) a la calle, por querer asomarse al balcón. Nada roto, solo la mandíbula desencajada y un susto de muerte, por que Ian y yo no la encontramos hasta 5 horas después..., suerte de él... Un beso enorme, mi osito!
Recuerdo no poder llorar, por el pasmo..., pero si sentirme muy triste, ahí, sentada en el sofá, con la botella de agua helada... Misha estaba tan tranquila encima de mi cama, como cada noche... Prometo enseñaros una foto de ella un día de estos, de mi princesa... Me doy cuenta de cuánto quiero a este bicho..., este noviembre cumplirá dos años, y en enero hará también dos que la tengo, regalo de reyes de Ian.
Dicen algunos, que todo ser humano debe conseguir tres cosas antes de morirse: plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo... También he oído decir, que para saber si sabrás ser padre o madre, debes primero tener una planta y cuidarla (eso ya lo hago, y me viven todas, de momento..., toquemos madera...); si lo consigues, el siguiente paso es cuidar un animal (ídem de ídem, la pobre solo se me muere en sueños... jeje); finalmente, ya puedes tener un hijo... Y representa que lo sabré cuidar si hago bien todo eso?? Pero no dicen los médicos que no son compatibles un bebe y un gato en una misma casa?? Y cuando el gato se te come todas las plantas, por muy elevadas que las pongas (por que la cabrona salta que da miedo...), y que tú has cuidado con tanto amor hasta la llegada del animal?? No sé, no sé..., que mal rollo. Mi maternidad está más que planteada, aunque hora no es el momento...
De mientras que los hijos llegan, que suena esto a un sentido de la responsabilidad que me asusta..., me voy a decantar por salir esta noche. Mamá va a ser un poco mala hoy, tengo ganas de fiesta..., de mucha fiesta... de pillar un pedal que no me reconozca ni mi padre!! (el chiste es demasiado bueno Scott, lo tenia que poner... jeje).
Espero llamar a mis amigos esta tarde, y proponerles un revival de viejas glorias en el Bora Bora ( si, es cierto, el nombre es muy cutre... ). Ellos, que me llevan 5 y 6 años de diferencia, me lo agradecerán... O eso, o nos vamos a escuchar Jazz... Lo mejor de este local es el dj, debe tener unos venti-algo, pero el nene pone unas canciones de una época en la que ni siquiera sus padres habían pensado en casarse... Ideal para pasar un rato distendido, por la música, el ambiente y las mentoladas caipirinhas que te ofrecen a 3 euros... No sé cuantas caerán esta noche, espero que muchas...; hoy no vuelvo a casa antes de las 7...!! además, con el cambio de horario, voy a tener una hora más para seguir bebiendo!!!
Me he levantado medio borracha, he ido palpando las paredes de la casa hasta llegar a la nevera (en la otra punta...!! por que mi nevera no esta en la cocina...), y me he desplomado en el sofá... No me tenía en pie... Entonces me ha venido a la memoria todo el sueño, de inmediato... : iba en coche con uno de los amigos de Ian, y Misha venía conmigo; de repente, él que conducía, agarra una curva muy cerrada a la izquierda, dejando ver al otro lado un precipicio..., de vértigo!, por que las ruedas casi rozaban la parte más externa del arcén. Miro abajo y veo rocas, enormes, y agua... Parecía el acantilado de un río, de alta montaña..., pero estábamos al lado de mi casa!! Lo sé por que no hacía ni 30 segundos que nos habíamos montado en el coche y me había venido a buscar a casa... Entonces, al muchacho, no se le ocurre otra cosa que coger a Misha... y tirarla por la ventana!!! Así..., como quien no quiere la cosa...!!! Hijo de puta...!!!
Yo, quedo muerta, contemplando el espectáculo y la sonrisa de su cara..., viendo como la pobre gata cae por el precipicio y termina por reventar en las rocas... Ni un maullido, ni un grito por mi parte, ni un intento por cogerla, ni un puñetazo al subnormal de mi amigo... (desde hoy, ya no sé si me apetece que lo sea, la verdad...). Nada..., absolutamente nada... Lo único que yo esperaba, asomándome a las rocas, era que mi gata se recuperara, que me diera alguna señal de vida, que me demostrara que ella ha salido de situaciones peores..., como cuando se cayó de mi antigua casa (un 4º) a la calle, por querer asomarse al balcón. Nada roto, solo la mandíbula desencajada y un susto de muerte, por que Ian y yo no la encontramos hasta 5 horas después..., suerte de él... Un beso enorme, mi osito!
Recuerdo no poder llorar, por el pasmo..., pero si sentirme muy triste, ahí, sentada en el sofá, con la botella de agua helada... Misha estaba tan tranquila encima de mi cama, como cada noche... Prometo enseñaros una foto de ella un día de estos, de mi princesa... Me doy cuenta de cuánto quiero a este bicho..., este noviembre cumplirá dos años, y en enero hará también dos que la tengo, regalo de reyes de Ian.
Dicen algunos, que todo ser humano debe conseguir tres cosas antes de morirse: plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo... También he oído decir, que para saber si sabrás ser padre o madre, debes primero tener una planta y cuidarla (eso ya lo hago, y me viven todas, de momento..., toquemos madera...); si lo consigues, el siguiente paso es cuidar un animal (ídem de ídem, la pobre solo se me muere en sueños... jeje); finalmente, ya puedes tener un hijo... Y representa que lo sabré cuidar si hago bien todo eso?? Pero no dicen los médicos que no son compatibles un bebe y un gato en una misma casa?? Y cuando el gato se te come todas las plantas, por muy elevadas que las pongas (por que la cabrona salta que da miedo...), y que tú has cuidado con tanto amor hasta la llegada del animal?? No sé, no sé..., que mal rollo. Mi maternidad está más que planteada, aunque hora no es el momento...
De mientras que los hijos llegan, que suena esto a un sentido de la responsabilidad que me asusta..., me voy a decantar por salir esta noche. Mamá va a ser un poco mala hoy, tengo ganas de fiesta..., de mucha fiesta... de pillar un pedal que no me reconozca ni mi padre!! (el chiste es demasiado bueno Scott, lo tenia que poner... jeje).
Espero llamar a mis amigos esta tarde, y proponerles un revival de viejas glorias en el Bora Bora ( si, es cierto, el nombre es muy cutre... ). Ellos, que me llevan 5 y 6 años de diferencia, me lo agradecerán... O eso, o nos vamos a escuchar Jazz... Lo mejor de este local es el dj, debe tener unos venti-algo, pero el nene pone unas canciones de una época en la que ni siquiera sus padres habían pensado en casarse... Ideal para pasar un rato distendido, por la música, el ambiente y las mentoladas caipirinhas que te ofrecen a 3 euros... No sé cuantas caerán esta noche, espero que muchas...; hoy no vuelvo a casa antes de las 7...!! además, con el cambio de horario, voy a tener una hora más para seguir bebiendo!!!
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